Refinanciar tu hipoteca es un procedimiento que puedes hacer con tu banco para reconsiderar los términos de la deuda (tiempo e intereses de pago) y, básicamente, adquirir otra deuda o una hipoteca de segundo grado sobre tu inmueble.
“¿Es recomendable refinanciar mi hipoteca?”. Dependerá de cada caso. Lo primero que hay que tomar en cuenta es que el banco solicitará, nuevamente, una serie de recaudos como si fuera el primer préstamo a adquirir: Certificación de ingresos, activos, deudas, record crediticio… Teniendo todo en orden, debes asegurarte que el precio de tu inmueble es superior a la cantidad que deseas pedir prestada al banco en el refinanciamiento, para lo que puedes consultar a un asesor inmobiliario de confianza.
En la página www.laopinion.com, Yasmeen Al Shawa recomienda que, antes de tomar la decisión, se considere la cantidad de años que se tiene pagando la hipoteca actual pues, “si llevas muchos años pagando tu anterior préstamo es posible que ya hayas abonado buena parte de los intereses, que es lo primero que se paga, y no el principal. Si refinancias, vuelves a pagar intereses por los años que te comprometas por un capital que no has amortizado. Al final, sale caro”.
Ventajas sobre desventajas
En el refinanciamiento de las hipotecas, una opción es aumentar el tiempo de pago y así rebajar la cuota mensual, lo cual significará –en la mayoría de los casos- que aumenten los intereses anuales, lo cual representa una preocupación para los usuarios.
Leonardo Hernández, autor del portal www.pnlfinance.com, en su artículo “Cómo analizar la refinanciación de una hipoteca”, explica que “al extender el plazo de la hipoteca, incluso sin una disminución de la tasa de interés, los pagos mensuales bajan. La explicación simple es que nos están dando más tiempo para pagar el préstamo, por lo que lo podemos pagar más lentamente”.
Se puede tomar por ejemplo la siguente variación en cuanto a tiempo/tasa de interés de una hipoteca: un préstamo de US $200.000 a 15 años tiene una tasa de interés a 5,5 por ciento, mientras que en el mismo, pagadero a 30 años, el interés sube a 6,0 por ciento.
En el préstamo a 15 años, las cuotas mensuales equivaldrían a US $ 1.634, mientras que en el de 30 años las cuotas bajarían a US $ 1.199.
Según continúa Hernández, dependiendo de la necesidad del solicitante, el beneficio de la disminución del monto de las cuotas nos deja dinero para pagar otros compromisos económicos, aunque paguemos a la larga más en intereses. Además, recuerda que “si hacemos pagos extra a la hipoteca (en el transcurso del tiempo) podremos terminar pagando el crédito en un plazo incluso menor” al estipulado originalmente con el banco, “y por lo tanto no habremos terminado pagando más intereses”
Debes considerar la necesidad del refinanciamiento de la hipoteca, el valor de tu inmueble y durante cuántos años más pretendes vivir en él (si estás próximo a mudarte, no vale la pena un refinanciamiento), y qué uso le vas a dar al dinero que obtengas tras la negociación.
Consulta con tu asesor o entidad bancaria de preferencia sobre el refinanciamiento de hipotecas en tu país, aunque los principios son básicamente los mismos en toda América Latina.
El servicio de www.cotizaseguro.net ofrece al cliente la posibilidad de solicitar a varias entidades bancarias sus planes de financiamiento e hipotecas, y así elegir entre varias opciones la que mejor se adapte a los requerimientos personales.